lunes, 30 de enero de 2012

Debí estudiar Sociología

Ayer por primera vez en mi vida tuve la oportunidad de disfrutar un partido de fútbol en el Estadio Olímpico Universitario. Fue un tache a mi bucket list y una experiencia que, como universitaria, debí haber realizado desde hace mucho tiempo atrás.

En fin, no les contaré del estadio ni del partido ni de tanta peladez que mi lengua soltó al ver el desempeño de mi equipo en la cancha, vaya ese empate no lo veía venir.

Hoy les contaré que yo, como dice el dicho, hago como los romanos en Roma. Sí, así es. Soy de las personas que piensa se debe actuar según las circunstancias, el lugar que visites, la gente con que te mezclas.

Me adapto al momento y que me encanta participar del jolgorio colectivo. Si el plan es andar de mochilazo, yo saco el pan y las latas de atún para la supervivencia y si dicen ópera me documento y aprendo de Puccini y demás. Eso, según entiendo es hacer Sociología.

Y no sólo participar del colectivo, también la observación participante y no participante forman parte de la Sociología. Si esta es mi impresión, es gracias a Ajna, mi Socióloga de cabecera.

Por ella comprendí que el objeto de estudio es el ser humano y su relación con su medio, con la sociedad, en un momento y espacio. Entendí que, al anotar en su pequeña libreta la dirección de una pulcata en pleno corazón del centro histórico, no era para saciar su sed ni la celebración de una bacanal, al contrario, era hacer Sociología mezclándose con el entorno, conocer de la gente que acude a esos lugares, entender la preferencia de las mismas por los curados de guayaba y por qué no, agradecer a los ancestros el aguamiel de los dioses.

Ayer, al verme inmersa en el ambiente futbolístico y siendo partícipe del mismo, entendí a lo que Ajna se refería y pensé, debí estudiar Sociología... En realidad creo que pude haber hecho muchas cosas.
Enviado desde mi oficina móvil BlackBerry® de Telcel

4 comentarios:

Abeto dijo...

Muy bien, buena reflexión... Ya esta acordada la próxima visita de campo heee!!!!!

isabella dijo...

Hasta hoy pude degustar este rico cafevito.
Esa ajna se siente honrada y agradecida por tu palabra.
Yo adoro vivir en un mundo tan contradictorio y lleno de subjetividad. Que reta al sujeto a dialogar con lo que observa y con el mismo, producto de la observacion.
Es delicioso pendar y crear a partir de lo aparentemente solido; pero también a partir de aquello que se escapa de entre los dedos.
Humildemente hagamos sociologia.

isabella dijo...

Hasta hoy pude degustar este rico cafevito.
Esa ajna se siente honrada y agradecida por tu palabra.
Yo adoro vivir en un mundo tan contradictorio y lleno de subjetividad. Que reta al sujeto a dialogar con lo que observa y con el mismo, producto de la observacion.
Es delicioso pendar y crear a partir de lo aparentemente solido; pero también a partir de aquello que se escapa de entre los dedos.
Humildemente hagamos sociologia.

isabella dijo...

Hasta hoy pude degustar este rico cafevito.
Esa ajna se siente honrada y agradecida por tu palabra.
Yo adoro vivir en un mundo tan contradictorio y lleno de subjetividad. Que reta al sujeto a dialogar con lo que observa y con el mismo, producto de la observacion.
Es delicioso pendar y crear a partir de lo aparentemente solido; pero también a partir de aquello que se escapa de entre los dedos.
Humildemente hagamos sociologia.