sábado, 9 de junio de 2007

Ecos de la Ciudad

Leyendo uno de mis blogs favoritos me puse a pensar en cómo nuestra ciudad sube de "nivel" gracias a las decisiones tomadas por la autoridad.


Se casó el carnal Marcelo y, sin nada de presunción, quizo internacionalizar al Df. de manera que rimara con lo rimbombante de su apellido...je je je... por lo menos el de Mariagna suena más "nice".



El primer paso fue la instauración de playas públicas a fin de dar "mar y circo" (el pan está en los pinos jajaja) a las miles de personas que no salieron de vacaciones en el puente de semana santa.



Le falló... Yo creo que pensaba que la Cd. de México se iba a ver como el río Sena con tanto hermoso parisience asoleando su linda piel...¡pues no!... Aquí pura panza chelera y un "¡Ire tía...aca 'sta lo bajito!" se escuchaba de un asistente cuando trataba de meter a su bigotona parienta a una de las albercas... Digo, en serio, no hay comparación...!



Luego dijo: En uno de mis viajes a Ámsterdam recuerdo haber visitado el museo de Van Gogh y transportarme por la ciudad en bicicleta... ¿Por qué no hacer lo mismo en el Df.? Pues lo hizo. Lo malo es que sólo es una vez al mes, por un lapso de 8 horas y en Domingo...

¿Que no estará enterado de los Bicitekas? ¡Ellos tienen añales recorriendo la ciudad en bici! pero como no tienen un cargo público, no permiten que sus recorridos sean a plena luz del día sino de noche...


Es una verdadera lástima que ésta última idea no tenga eco en la conciencia de la población.

Un día, releyendo un número pasado de una de mis tantas revistas, me encontré con el dato curioso de que la velocidad promedio de los automovilistas en la ciudad es de 20 km por hora... Digo, con esos estándares mejor tomo mi bici y llego más rápido a mi destino.

Y sí lo he pensado. El trayecto para llegar de mi casa al trabajo, en un día sin tráfico, se realiza en 30 minutos. A lo mejor en bici hago 50, pero ya tonifiqué mis piernas, respire un poco y quemé las calorías necesarias para echarme, sin culpa, una hamburguesa jajaja.

El lado obscuro de sacar la bici son los transportistas.Con tanto microbusero kamikaze, es más fácil que pierda la vida antes que lograr mi cometido. Llegar al trabajo o a cualquier otro lugar, sería como caminar en el agua... nada más que acá no habría un Jesús que me dijera... Pily, por las piedritas jajaja...!

Sin embargo espero que esta idea no sea desechada. Sí, ya sé. El circuito ciclista está del mal pero me acuerdo que los chicos Condechi alababan al Peje por su plantón pues gracias a éste, era deliciosos andar en el Paseo de la Reforma en "cleta" y disfrutar de parques y avenidas (aunque estuvieran rodeadas de carpas) con mucha tranquilidad.

Si de imitar se trata, sería bueno adoptar esta europea actitud y que, asociaciones como los Bicitekas, no tengan que circular por nuestro Df. en calidad de ladrones... Salud!





3 comentarios:

Zereth dijo...

DF de mis amores, a pesar de todos y contra todo pronóstico, es una ciudad que aún posee muchos lugares agradables y hermosos.

Ojalá se pudiera circular en bicicletas sin exponer tanto la vida.

Felicidades diableca por el cambio de formato, mmm pondrás una imagen en la cabecera?... te ayudo si es que no se me ha olvidado como hacerlo.

GOMÍS dijo...

Amsterdam???

Así como copiaron el Transmilenio de Bogotá y le pusieron Metrobus, ahora hace lo msimo con los domingos y la ciclovía...

Aquí (en Bogotá) todos los domingos y también por 8 horas, cierran avenidas principales para que la gente salga a andar en bicicleta, en patines, patineta... Todo lo que tenga "llantitas".

Chale, extraño mi DF!!!

Ingrid dijo...

y a shakira? dónde me dejas a shakira? también fue a amenizar el rato